Retratos y ritmos de Buenos Aires

Pocos son los emblemas de Buenos Aires. Pocos también, los artistas que se dedicaron de lleno a descifrar esta ciudad, por demás misteriosa. Horacio Coppola y Astor Piazzolla pintaron su aldea, desde su lugar. Ambos, habiendo transitado por las calles de Europa, supieron volver a sus raíces y reivindicar lo autóctono de Buenos Aires. Tango, obelisco, calles y habitantes de la época, fueron las musas inspiradoras de estos creadores.

Horacio Coppola nació en 1906 en una familia genovés. Comenzó sus estudios en Derecho, pero al poco tiempo desistió para dedicarse de lleno a la fotografía, y en la edad de 21 ya se lo consideraba un fotógrafo con nombre y apellido. Transitó por el área cinematográfica, haciendo películas, pero siempre manteniendo la misma temática que lo enamoraba: la ciudad. En una entrevista con el también fotógrafo Zimmermann, a sus 104 años, el cazador de imágenes mantenía intacta su pasión, y definía su trabajo como:

“Desde mi ventana miro lo real iluminado: encuentro una imagen, por así decirlo, de mi mundo propio. Cuando de los infinitos puntos de vista posibles desde mi ventana, elijo ése que es para mí el más esencial y revelador de lo real, del presente. Ahora, con la cámara fotográfica, me posesiono de esa imagen: soy fotógrafo”.

En el siguiente video, no te pierdas las imágenes de Coppola, que demuestran una perfecta composición y simetría. La perspectiva de Coppola de la ciudad de Buenos Aires, con sus calles, sus autos antiguos y  sus edificaciones:

Por su parte, Astor Piazzolla fue un músico argentino que se inspiró, al igual que Coppola, en Buenos Aires para componer, en su caso, melodías mezclando tango con música clásica.

Al igual que Coppola, estuvo relacionado en el ámbito de cine, viajó a Europa para aprender, y también compuso música con las letras de Jorge Luis Borges.

En primer lugar, viajó a Nueva York, donde se inspiró en los suburbios para sus composiciones. Luego, transitó por París, donde estudió a partir de una beca.

Fue invitado por Gardel para participar en la película El día que me quieras, pero su padre no lo dejó. Esta negativa salvaría su vida, ya que, en ese viaje, el staff de la película pierde la vida.

En 1950 compuso la banda sonora de la película Bólidos de Acero, ya consagrado en la profesión.

Realizó además un disco, El tango, que contiene letras de Borges como El hombre de la esquina rosada.

En el siguiente video, vas a apreciar la música de Piazzolla, con las imágenes de Coppola. “Canto y fuga”, es la obra del músico, donde se puede escuchar la mutua influencia entre la música clásica y el tango.

 

La obra emblemática de Piazzolla fue “Adiós Nonino”, que la compuso a partir de la muerte del padre.

“El (tango) número uno es Adiós Nonino. Me propuse hacer uno superior y no pude”. 

No nos olvidemos de lo artesanal

Entre medio de tanta era digital, donde todo es descartable y rápido, volvemos a lo ancestral, a lo básico, a la foto artesanal.

Una caja o lata, papel fotográfico y muchas ganas de investigar y ponerse a probar, es lo que hace falta para armar una cámara estenopeica, para volver a lo romántico de la fotografía, a la espera, a la magia y la incógnita de no saber que va a salir de esa toma.

Agudizar la mirada, el sentido del espacio y la posición perfecta, para captar ese pedacito del mundo que queremos atesorar.

"Debo confesar que la fotografía es lo que me mantiene vivo, me atrapó desde pequeño, tenía ocho años cuando descubrimos con mis hermanos, en el living de nuestra casa paterna y a plena oscuridad, un pequeño rayito de luz que se colaba por la ventana", contaba  el profesor de fotografía estenopeica, Karlo Sosa, para el medio digital: El ángel caído.

De qué hablamos, cuando hablamos de la cámara estenopeica

Es una cámara sin lente, en lugar de lente tiene un pequeño estenopo (orificio) por donde entrara la luz necesaria para obtener la imagen buscada. Es una caja, lata, que se pinta de negro por dentro para evitar que se filtre luz.

Para mayor nitidez en nuestra imagen hay un truco, la apertura tendrá que ser muy pequeña, de unos 0,5 mm (1/50 pulgadas). Para esto se aconseja recortar un pedacito de aluminio (latas de gaseosa) para reducir el grosor al máximo y después crear el agujero con una aguja, al final es necesario lijar los bordes para que el agujero quede lo más uniforme posible.

El tiempo de exposición, cambia a diferencia de las cámaras que conocemos, va a ser más extenso debido al tamaño de la apertura, pueden ir desde 5 segundos hasta más de una hora.

La imagen se forma mediante puntos, el famoso círculo de confusión, por eso cuando más pequeño sea el orificio mejor definición y nitidez tendrá la imagen. La nitidez, por ejemplo en la fotografía convencional, en lo analógico se conoce como grano y en lo digital lo determinan los pixeles, lo que conocemos como la sensibilidad.

La imagen que se formará dentro del papel fotográfico que ingresemos en la cámara, estará invertida, por eso una vez que hayamos tomado la foto en un cuarto oscuro revelaremos el papel fotográfico y luego positivaremos la imagen para finalmente obtener nuestra toma.

Para los que quieran olvidarse por un rato de lo rápido, lo instantáneo, acá tienen una opción artesanal y artística, una opción para expresar lo que ven sus ojos.

Photoshop, ética y moral

“El photoshop es una herramienta artística genial, que no debe tergiversar una realidad periodística, y en el caso artístico es un acto publicitario, es válido. A mí algunos me piden que sea cirujano plástico, pero todas las publicidades muestran una mentira o una realidad exagerada y creo que la gente lo sabe”, explicó Gabriel del Aguila, fotógrafo profesional.

El photoshop aplicado de forma extrema a mujeres, impone una belleza artificial, a veces, el retoque es tan excesivo que le borran hasta el ombligo. Esto trae aparejado mujeres con bajo autoestima, frustradas en cuanto a alcanzar la perfección estética, y en su mayoría por la mentira que venden las imágenes televisivas, en publicidades, etc.

Por otro lado, el impacto también sirve, por ejemplo, para que algo llame la atención y allí se entra en la discusión de si está bien o no sacarle una foto artística, a una situación delicada como lo puede ser un muerto o una situación de extrema pobreza.

Por ejemplo, la última foto que trajo repercusiones sobre su publicación, fue la de Jazmín de Grazia: “Los valores están en uno mismo, el ejemplo más claro es la fotografía de Jazmín o las fotos que le hicieron a Spinetta, que fue una guardia. Los Paparazzi son los que están lidiando con estos temas; yo trato de publicar una fotografía que tenga contenido periodístico. Después a la hora de fotografiar algún momento esta en uno”, expresó Federico López Claro, fotoperiodista.

“El fotoperiodista, Pepe Mateos cuenta que cuando fotografió el asesinato de Kosteki y Santillán, no le saco fotos a las caras de los cuerpos cubiertos de sangre porque algo le dijo que estaba mal si lo hacía”, explicó Federico, y cerró diciendo que muchas veces los fotógrafos se ven obligados a publicar cosas que no les gusta, pero hay que cumplir órdenes.

Evidentemente, en estos casos, juega la moral y la ética del fotógrafo, ese es el rol original del fotoperiodista, mostrar una realidad, y al igual que en la gráfica, es un recorte del mundo.

La fotografía es registro, es un testigo oculto. Sin registro no hay historia y sin historia no hay personas que puedan mejorarla. A continuación, imágenes que demuestran lo escrito:

 

 

Foto que expone el exceso de photoshop.

 

 

 

 



 

 

 

Foto que expone la crueldad de la guerra de Vietnam, 1972, niños huyen tras un bombardeo.

 

 

 

 

 

 

 

Video que expone los drásticos retoques con Photoshop.

 

 

Gran repercusión de la muestra Rabobank

En su tercer día de exposición en el Museo Nacional de Bellas Artes (MNBA), la colección Rabobank tuvo buena aceptación en el público.  Las obras o artistas ponderados por los visitantes fue variado,  dependiendo de cada sujeto, pero prevalece la misma idea fuerza.

En el marco del homenaje a la fotógrafa Sara Facio, el MNBA exhibe desde el 12 de este mes, una colección de obras que tratan sobre la realidad social y cultural argentina.  La muestra fue curada por Marjan Groothuis y Facundo de Zuviria, que privilegiaron la fotografía directa. Son más de 200 obras de 57 artistas, reunidas a partir de donaciones.

“’Matadero’ es la obra que más me gustó, y también ‘Pie de barro’”, dijo la visitante de nombre Alicia Belous. Por su parte, Lorena Di Meo, afirmó:“‘Casita en la autopista’ me parece una de las mejores obras”. Esta espectadora valoró la composición geográfica y abstracta. Pero en fotografía los gustos son variados: para otras personas, esta misma obra, pese a su correcta composición,  es infantil y carece de un mensaje profundo.

Para Belous, la mejor fotógrafa es Greta Stern, con su obra “Pan y mate”. Di Meo explico que “cada foto muestra el enfoque del artista, su visión personal. Hay muchas cuestiones, de tiempo, geográficas, historicistas”.

‘Enrique Mario’, ‘La Salsera’, ‘Niña Chaqueña’, ‘Puerto Iguazú’, ‘Taxista en la Quiaca’, ‘Piezas’, son algunas de las obras emblemáticas de esta muestra.


Para agendar:
Colección Rabobank
MNBA
Pabellón de muestras temporarias
12 de septiembre al 10 de octubre

Nuestra razón de ser

Este blog pretende acercar la pasión por la imagen, -como titula Aldo Sessa un libro-, al público. Queremos explicar un poco la historia de la fotografía, desde Ver Meer hasta Sara Facio, pasando por Kappa, entre muchos otros grandes artistas.

También cubriremos la actualidad de este mundo de la imagen tan en boga en los últimos años. Los invito a seguirla, dejar comentarios y hacer preguntas.

Apuntamos a trasmitir el gusto por la fotografía, y la relación que ella guarda con el periodismo, al ser testimonio irrefutable del pasado. Con una mirada de compromiso social, trasportaremos al público al mundo de las ideas y sentimientos.

Pretendemos acercar todas estas ideas, técnicas y métodos a la comunidad Registrando Momentos, incluyendo experiencias y aprendizajes personales